Cultura

52 FESTIVAL INTERNACIONAL DE CINE DE HUESCA

Estela Rasal: “Va a ser una edición del Festival de Cine para el recuerdo”

La directora del certamen avanza las claves de la 52 edición, que se celebra desde este viernes hasta el próximo 15 de junio

Estela Rasal.
Estela Rasal.
Laura Ayerbe

El Festival Internacional de Cine de Huesca inaugura este viernes su edición número 52 que, según avanza su directora, Estela Rasal, “va a ser para el recuerdo”, ya que recibirá a figuras de la talla de Victoria Abril o Víctor Erice.

Hasta el 15 de junio, 78 cortometrajes a concurso mostrarán temáticas muy actuales como la guerra, con las que deberán conquistar al jurado para llevarse el Premio Danzante Oro en sus tres categorías -internacional, documental e iberoamericano-, que reportará a los directores o directoras 5.000 euros y la calificación para competir en los Oscar y los Goya.

Contaremos con la presencia de unos 40 cortometrajistas venidos de diferentes partes del mundo”, comenta Rasal sobre una nómina de realizadores de 30 países, entre los que destaca la incorporación de Irán.

Este año se entregarán dos Premios Luis Buñuel a Victoria Abril, “una actriz icónica de nuestro cine”; y a Víctor Erice, “uno de los grandes nombres del séptimo arte”, valora.

El Premio Ciudad de Huesca Carlos Saura será para Isaki Lacuesta, “un director que engancha con sus películas” -destaca-, mientras que el Premio Pepe Escriche recaerá en el Festival Internacional de Cortos de Clermont-Ferrand, el más importante del mundo.

Este es el gran referente del certamen oscense, que necesita superar su presupuesto de 250.000 euros para “seguir creciendo y diferenciándose” del resto, reivindica Rasal.

¿Cómo afronta su segundo año como directora del Festival de Cine de Huesca?

—Con mucha ilusión y respaldada, como siempre, por el mejor equipo.

¿Cuáles son las temáticas más interesantes de las 78 “joyas” a concurso?

—Las temáticas suelen ser un reflejo de lo que estaba sucediendo uno o dos años atrás. En esta ocasión, la temática de guerra tiene peso y, como novedad, tenemos un poco más de comedia.

El festival recibió más de 2.000 propuestas. ¿Por qué consigue atraer a tantos directores y directoras?

—El Festival Internacional de Cine de Huesca es uno de los seis de toda España calificador para los Oscar de Hollywood, además de ser calificador para los Goya, por lo que es una puerta de entrada a estos galardones. Además, no olvidemos que otra de las razones es que los premios del festival son muy atractivos, tanto por su prestigio, como por su cantidad económica.

Irán es la novedad dentro de los 30 países participantes en la cita. ¿Orgullosos de seguir sumando cinematografías?

—Sí, satisfechos de recibir trabajos de nuevos países y de poder llegar a todas las partes del mundo.

¿Cuántos cortometrajistas van a estar presentes este año?

—Contaremos con la presencia de unos 50 cortometrajistas venidos de diferentes partes del mundo.

¿Por qué es tan importante para ellos acudir a Huesca?

—Vienen a presentar y defender sus trabajos con el objetivo de alzarse con uno de los Danzantes de oro, que les otorgará 5.000 euros y la calificación a los Goya y los Oscar.

La gran estrella de esta edición va a ser Victoria Abril, una de las mejores actrices de la historia de nuestro país, que recibirá el Premio Luis Buñuel. ¿Qué va a suponer tenerla en Huesca?

—Para Huesca es una maravilla contar con Victoria Abril, una actriz icónica de nuestro cine que ha traspasado fronteras.

Isaki Lacuesta recogerá el Premio Ciudad de Huesca Carlos Saura en la gala inaugural. ¿Qué tiene este director que tanto engancha al espectador?

—Es un director que engancha con sus películas. Es una mezcla entre técnica y corazón.

El Premio Pepe Escriche se concederá al Festival Internacional de Cortos de Clermont-Ferrand, el más importante del mundo. ¿Qué puede aprender Huesca de este certamen?

—El Festival de Clermont-Ferrand tiene una sección de mercado importantísima que hace que se cierre el círculo: exhibición de trabajos-producción y origen de los mismos. De la sección de mercado surgen oportunidades para seguir creando. En Huesca hemos empezado a hacer foco en esta parte y seguiremos trabajando esta línea en la medida que nuestro presupuesto nos lo permita.

La sorpresa de última hora del festival ha sido un segundo Premio Luis Buñuel a Víctor Erice. ¿Por qué se ha tomado esta decisión tan estelar?

—Es algo que ya ha pasado en ocasiones anteriores, como en la edición 45 cuando reconocimos a Álex de la Iglesia y Costa-Gavras. Erice regresó al cine con un nuevo largometraje 30 años después de su última obra y fue uno de los grandes títulos del año. Su nombre es uno de los grandes entre el séptimo arte y son contadas ocasiones las que acepta este tipo de galardones. Para nosotros es una forma de devolver todo el cariño al público cinéfilo que nos apoya y que dos nombres como Victoría Abril y Víctor Erice visiten Huesca el 11 y 12 de junio. Podemos decir, sin miedo a equivocarnos, que será una edición para el recuerdo y esta dupla serán en gran parte responsable de ello.

Francia es el País de Honor de esta edición. ¿Cómo se va a notar en la programación?

—Se va a notar a lo largo de toda la semana: el Premio Pepe Escriche, el largometraje francés Los Indeseables, proyecciones de cortometrajes de escuelas francesas, de la sección En Femenino de Clermont-Ferrand y tendremos también intercambio de proyectos e ideas entre España y Francia en las actividades de networking.

También se proyectará el último trabajo de Laura Gómez-Lacueva, Alumbramiento. ¿Un merecido homenaje a una actriz ligada al festival?

—Sí, Laura era una gran amiga del festival y de muchos miembros del equipo. Verla en la pantalla grande será emocionante.

Los Vermú con… volverán a ser de lo más esperado de este año. ¿A quiénes tienes más ganas de escuchar?

—La verdad, ¡a todos y todas! Por eso los hemos programado, porque lo que van a contarnos es de interés para los profesionales y para el público en general.

Durante la cita también se podrá disfrutar de algunos largometrajes. ¿Cuáles son los más destacados?

—Yo destacaría todos, claro, cada uno en su estilo nos aportan grandes historias.

¿Qué más resaltarías de la programación de este año?

—Por un lado, el concurso de escaparates junto a la Asociación de Comercio y ese cinetapas y concurso del cóctel Carlos Saura junto a la Asociación de hostelería. Por otro lado, este año hemos puesto un poquito más el foco en los jóvenes y junto con nuestro comité de la juventud tendremos actividades más orientadas a ellos (Muestra de cortos realizados por institutos el día 8, el grupo Lágrimas de San Lorenzo el día 14…). Además, para los menores de 25 años tenemos preparadas unas pulseras para acceder a todas las actividades gratuitamente.

Aunque el festival sólo tiene un presupuesto de 250.000 euros, su impacto económico total es superior a los 5 millones. ¿Se necesita más dinero para posicionar la marca todavía mejor?

—Sí, claramente, para mantener la posición y para además profesionalizarnos todavía más. Tenemos que seguir creciendo y diferenciarnos, y llevar la imagen del festival y del territorio que lo acoge a todos los rincones del mundo. Para ello trabajamos en mejorar las secciones presentes y crear nuevas que nos den mayor impacto y prestigio. Para todo esto es necesario ir aumentando el presupuesto.